¿Quiénes son los
Obreros de la
Undécima Hora?
La primera vez
que escuché hablar de la parábola de Mateo 20, fue en el 1966, y a quien le
escuché hablar de esta parábola era un apóstol y profeta México-Americano enviado
desde Hemet, California, en quien vi manifestaciones que nunca había visto en
mi vida en ningún otro ministerio; antes de conocerle, yo me había relacionado con
evangelistas poderosos, con los que vi portentos y milagros sobrenaturales muy
extraños, personalmente había orado y visto en ese año de 1966, a una persona
resucitada en mi ministerio, fui testigo de milagros de todos tipos; sin
embargo, al escuchar ha este hombre y caminar con él por dos años, escuché
palabras que nunca había oído, vi cosas que nunca había visto, y fui testigo de
manifestaciones de los dones espirituales en su vida como nunca he vuelto a ver
a otros, la primera vez que fui impulsado por el Espíritu a abrazarlo, tuve una
vision con su interior que era inmenso y lleno de luz, mientras lo abrazaba
después de una manifestación poderosa del Señor a través de él, escuché la voz
del Señor decirme: -te estoy permitiendo abrazar a uno de los pocos hombres en
el mundo que conocen de mi poder para estos tiempos-, este hombre fue Elías
Serna Palacios él me habló de los obreros de la undécima hora, en el sentido de
que era gente especial que sería levantada en los tiempos previos al fin de
todas las cosas en la iglesia, para que ésta fuera restaurada en toda su
plenitud. ¡Fue todo lo que me dijo, pero me quedó tan marcado en mi ser, que
nunca olvidé sus palabras! Por años había orado por los obreros de la undécima
hora sin saber quiénes eran, ni cómo serían. Hasta que en el mes de marzo del
2006 estando en Sacramento, California me fue mostrada una visión de parte del
Señor, en la que se me enseñaba por lo que veía,que la labor que
desarrollaríamos en esta nación tendría que ver con enseñanzas propias de los
últimos tiempos dentro de la Iglesia; me vi compartiendo la palabra a pastores
más que a miembros de las iglesias; Mientras enseñaba a un reducido grupo de
pastores cada tres meses (esta parte de la vision no ha tenido su cumplimiento total
todavía); fuera del edificio pude ver el título puesto en el frente del local
de enseñanzas, que decía: Centro de Capacitación: Obreros de la Undécima
Hora.
Desde entonces 1966, he estado orando por esos obreros con una
intensidad y urgencia que no
entendía, no todos
los días, durante
esos años, sino
de tiempo en
tiempo; lo que se me ha mostrado
es impresionante, porque tiene que ver con lo que sucederá con ese ejército de
obreros especiales que estaban
reservados para los tiempos del fin; para que
entienda lo que Dios hará con ese
ejército de desocupados en la obra porque no calzan en el sistema, le cuento que
he tenido visiones de cómo veo llegar dos o tres hombres a una ciudad, y
encenderla con la presencia de Dios en ellos; he visto visiones en las que se
me ha mostrado junto a otros hombres de Dios parados en las plataformas y ¡No
predicamos! La sola presencia nuestra provoca que la gente comience a caer
postrados al suelo y gimiendo por Dios, ¡Con hambre de Dios genuina! He visto
en visiones cómo una sola persona parada ante multitudes, provoca que esas
multitudes, eleven sus brazos al cielo cubiertos de la luz de Dios adorando y
dando todo reconocimiento al Santo y Único Dios Verdadero, ¡pero su adoración
es a Él como Padre!
El mes de junio de
este 2016 cumpliremos diez años de estar radicados en California,
reuniendo y fomentando acercamiento entre los pastores de las diversas regiones
de este estado; sin embargo, es hasta el año 2013, en adelante que se han
activado en mí, ls experiencias que recibí durante los años 1966 a
1968, de nuevo a partir del 2013 han vuelto lossueños
en palabras de Ciencia, y a través de visiones, en las que he estado recibiendo
mayor entendimiento acerca de las características de los obreros de la undécima
hora, de los cuales habló Jesús en la parábola de Mateo 20…
Leyendo este
pasaje y escudriñándolo a la luz de libros como Joel, Isaías, Jeremías y Ezequiel
podemos observar que aunque estos obreros son presentados en la parábola como
desocupados en la plaza, sin embargo, son enviados a la viña porque son personas
expertas en el conocimiento de su labor, y lo más importante, ¡El dueño de la
viña les cree capaces!A pesar de que en apariencia ellos no habían tenido espacio
para ser contratados, para el dueño de la viña y conocedor de la urgencia de
terminar un trabajo iniciado desde la mañana, estos obreros sí calificaban para entrar en la labor,
a pesar de que nadie los había contradopese a su conocimiento de lo que tienen
que hacer.Por supuesto que cuando leemos el final de la parábola nos damos
cuenta de la reacción que genera el hecho de que se les pague un denario por
una hora de trabajo que por lo visto fue tan intensivo que el dueño consideró
justo darles el salario de un día ¡Por una hora! Leyendo la parábola podemos entresacar
algunas conclusiones interesantes que hablan del que contrata, y los que son
contratados; de la respuesta en las labores de unos y las mismas labores
normales de los otros, además de la conciencia laboral del dueño.
«Cuando llegó la
noche, el señor de la viña dijo a su mayordomo: Llama a los obreros y págales
el jornal, comenzando desde los postreros hasta los primeros. Y al venir los que
habían ido cerca de la hora undécima, recibieron cada uno un denario. Al venir
también los primeros, pensaron que habían de recibir más; pero también ellos
recibieron cada uno un denario. Y al recibirlo murmuraban contra el padre de familia,
diciendo: Estos postreros han trabajado una sola hora, y los has hecho iguales
a nosotros, que hemos soportado la carga y el calor del día. Él respondiendo,
dijo a uno de ellos: Amigo, no te hago agravio; ¿no conviniste conmigo en un
denario? Toma lo que es tuyo, y vete; pero quiero dar a este postrero, como a
ti. ¿No me es lícito hacer lo que quiero con lo mío? ¿O tienes tú envidia
porque soy bueno? Así, los primeros serán postreros, y los postreros, primero;
porque muchos son llamados, mas pocos los escogidos». [Mateo 20:1-16los
resaltados en negrita son míos].
Observe que
cuando se habla de los muchos llamados, y los pocos escogidos, aquí no se está
hablando de salvación del alma, sino de resultados que se aportan en el llamado
en el que muchos calificarán, y otros no darán la talla y serán descalificados
para la labor. ¡Si supiéramos cuántos
serán desatados para que tomen la dirección que quieran en sus vidas
ministeriales, por resistirse a la dirección fresca y objetiva del Espíritu de
Cristo!
¡Otra cosa que debemos observar es, que inconscientemente!
Este es el panorama que sin que se note mucho, es el que está aconteciendo en
los continentes, y lo he podido ver con mis propios ojos, ministerios más
viejos en la obra, que critican, menosprecian, hablan con desden y hacen
escarnio de los “nuevos”, que están surgiendo en estos últimos tiempos, como
dice el refrán colombiano, “ese pelao no sabe na” y me quiere enseñar a mí. Por
ejemplo, cuando comenzamos a hablar de la necesidad de actualización en la
revisión de algunos principios bíblicos, uno de los dirigentes acá en
California, le dijo a uno de mis alumnos:
-“yo tengo veinte años en el ministerio” ¡¿Qué me van
a enseñar a mí?! Por la gracia de Dios, puedo hablar desde dos tiempos siglo
XX, y siglo XXI, de modo que a mis cincuenta y dos años de ministerio, puedo
decir que estoy manos arriba delante del Espíritu Santo y su Palabra inspirada
por Él; pues vengo de los tiempos de fuego de los años sesenta en que conocí
del Señor y paso
a paso al Señor,
y soy testigo de la apatía general en la iglesia a excepción de los grupos
neopentecostales, y carismáticos, que aunque comenzaron con mucho fuego y
manifestaciones sobrenaturales, ¡como que también se han conformado con el
formato cultual evangélico! Observemos
que los reclamos de los obreros de las primeras horas comenzaron a la hora de
dar los pagos correspondientes. Si no
entendemos que lo que fue (Inicio de la iglesia en el, primer siglo), así y aún
mayor deberá ser para los tiempos del fin, porque la iglesia tiene que operar
como Cuerpo en Plenitud, y para eso se requieren esos obreros que Dios está
preparando para enviarlos a su viña a hacer el trabajo efectivo no solo de
tiempo, sino que también da calidad y efectividad en sensibilidad del espíritu
para escuchar al Espíritu que es quien en el tiempo kairós [Su significado literal es «momento
adecuado u oportuno», en la teología cristiana se lo asocia con el «tiempo de
Dios». Dato tomado de Wikipedia la enciclopedia
libre]. Repito, en el tiempo kairós dará la orden de avanzar contra las huestes
del Hades, pero también hacia la iglesia en los continentes. Estamos en el
momento adecuado para que Dios de la orden a su ejército de obreros que estamos
siendo entrenados en el secreto, afinando el oído y la vista espiritual en el
entendimiento del tiempo de avanzar sobre la tierra, sabiendo que delante de
ese ejército de la undécima hora, la tierra está como el Huerto del Edén ¡Vírgen
del conocimiento necesario para los tiempos finales! Por causa de una teología
caduca (que es muy antiguo y fuera de uso), obsoleta e infuncional.
Definitivamente
estamos en una hora (espiritualmente hablando), en la que se requiere gente no
solo “experta”, sino que además gente disponible (no tan ocupada en sus
agendas), que no tienen tiempo para estar en la presencia de Dios esperando su
mover y su operar), por tanto hablamos de gente sedienta de hacer lo que se
espera de ellos, gente que pongan no
solo la mente en lo que hacen, puesto que no solo habilidad se requerirá en
estos tiempos postreros del fin, sino que también suprema sensibilidad del espíritu
acostumbrado a administrar las emociones y sentimientos del alma más allá de
los patrones acostumbrados. Observamos
en esta vibrante parábola que las cosas que provocarán estos obreros en la
viña, sacudirán la conciencia dormida, la morosidad, la indolencia, la falsa
confianza de que nadie más que ellos (los primeros), pueden hacer las cosas con
la estructuración, meticulosidad y prisa que se requiere, según las manecillas
del reloj para “servir a Dios hora y media en el local porque si no las ovejas
se les van antes de tiempo”; se necesita gente que sepa no solo conocer la
urgencia, pero también el equilibrio de hacer las cosas, que a Dios le agradan,
gente con sentido de paciencia dentro de la insistencia y capacidad para completar lo que
se requiere en la viña (iglesia en los continentes), por supuesto que la parte
final de la parábola deja entrever que hay desagrado en los primeros obreros
pues esperan más al ver que a los últimos se les dio un denario también; este
es un claro indicativo de lo que se está vislumbrando desde la década de los
sesenta, por los acontecimientos que han provocado los inicios de la
convocatoria de obreros en busca de la excelencia y agilidad de la labor que deberán
realizar bajo la dirección del Espíritu de Cristo, el panorama es bien claro, e
indicativo de lo que ha estado sucediendo desde esa década, que ha provocado, y
seguirá provocando, incomodidad a los primeros obreros que entraron desde la
mañana a la viña, si seguimos un rastreo histórico podemos darnos cuenta de
queen la parábola en Señor sabe que está incluyendo a los primeros obreros a
partir de los profetas (1450 a.C), contando a partir de los apóstoles, 33.d.C, visualizando
a los reformadores 1500; 1517; de los siglos anteriores y posteriores a Lutero
y Calvino; y a los renovadores como George Muller, Dwight L. Moody, George
Whitefield y John Wesley del siglo XIX, y refiriéndose a los obreros de la
undécima hora, ¡Nosotros desde las décadas de los sesenta en adelante!
Por esta parábola
podemos comprender que para los tiempos del fin de todas las cosas, los obreros
introducidos por el Señor (Los sin nombre), hemos estado siendo convocados para
trabajar en la viña (el Cuerpo de Cristo), más que en determinadas
denominaciones u organizaciones tradicionales (aunque muchos hemos salido de
esas denominaciones benditas porque han soportado todo el calor del día
sabiendo mantener los principios de la palabra frente a los tantos errores que
han querido ahogar a la iglesia), nos consideramos personas que operamos como “El”
profeta Elías que había de venir según Malaquías 4:5 igual que Juan el Bautista
que aunque venía con el espíritu y el poder de Elías ¡No que fuera Elías! Sino
que su misión se caracterizaría por preparar el corazón del pueblo ¡Como lo
hizo Elías en los tiempos de Acab!y se movería delante del Señor como “El” profeta
Elías con el espíritu y el poder de Elías, [Lucas 1:17]. El mismo Jesús anunció
que «… A la verdad, Elías viene primero,
y restaurará todas las cosas. Mas os digo que Elías ya vino, y no le
conocieron, sino que hicieron con él todo lo que quisieron; así también el Hijo
del Hombre padecerá de ellos. Entonces los discípulos comprendieron que les
había hablado de Juan el Bautista». [Mateo 17:10-13]; Juan el Bautista vino
con el mismo espíritu y la misma labor de Elías, por esta razón se constituyó
en el primer “El” que vendría con la misma vocación de Elías: Preparar el
corazón del pueblo para recibir al Señor. De igual manera en estos tiempos
finales, Dios está enviando ¡No un hombre! Sino un ejército con el espíritu y
el poder de Elías, para que despierten el gigante dormido que es el pueblo de
Dios ahora: La iglesia. Por esta causa y razón, los obreros de la undécima
hora, somos personas que operamos con el mismo propósito al ser enviados al pueblo
de Dios, con la misma misión y la misma labor que se le atribuía al profeta Elías:
Preparar el camino al Señor, apercibiendo a su pueblo. Yo recuerdo que estando
en un pueblo del este de República Dominicana colaborando en el pastorado con
una mujer de Dios, llamada Ondina, llegó a ese pueblito la profetisa con
apostolado América pastora de la Senda, en Santo Domingo, mientras orábamos en
una de las noches de reuniones, en Cañada Honda de Nisibon, la profetisa
América Rivera, se acercó y me dijo al oído: -Yo tengo muchos Juanes Bautistas
en este mundo, y quiero que tú seas uno de ellos-, el fuego que recibía al
escuchar esas palabras me marcó para siempre. Hombres con la unción y el poder
de Juan el Bautista constituidos en “El” Elías que había de ser enviado como
mensajero a preparar el corazón del pueblo para que como iglesia pueda
manifestar al Señor en su plenitud. Por esta razón, los obreros de la undécima
hora serán personas que no caben en el sistema de organizaciones denominadas
tradicionales,conocidas por sus estructuras doctrinales buenas e importantes, por
supuesto determinantes para cada época en que fueron introducidos a la iglesia
a través de los siglos; sin embargo, debemos comprender y aceptar que a medida
que crece el edificio, se requieren estructuras acordes a la labor y la
estatura de la edificación, estructuras se levantan según la estatura y
dimensiones que va adquiriendo el edificio, y las estructuras se adaptan al crecimiento que va dando
forma al edificio, no el edificio a las estructuras,
las estructuras deben desaparecenr conforme el edificio va adquiriendo la forma
que le permita ser el templo Santo al Señor, en el que Dios desea hacer su voluntad, y lo que a Él le agrada.¡No lo que a nosotros nos
agrade o nos parezca adecuado a nosotros! Entendemos que al hablar de este
tema puede quedar la impresión de que debiéramos aceptar a todas las personas
que expresan ideas extrañas, conducta recusable, en nombre de “una libertad del
Espíritu en sus vidas”, pero que sus conductas dejan poco de desear; por esto
quiero enfatizar que en realidad hablamos de personas que muestran carácter,
más que solo unción sin evidencias de lucidez Escritural y mental; hablamos de
gente con evidencias de fruto familiar excelente, de respeto a nivel interno de
los hogares en los que esposos se someten uno al otro en el Señor; hablamos de
hijos que respetan e imitan la conducta de padres que modelan a Cristo no solo
en poder, sino que también en conducta intachable; personas que son integras en
su vida moral, social, física y mentalmente, hablamos de personas que pueden
verificar con sus vidas, los diseños de la palabra de Dios en toda justicia,
verdad y Santidad por una relación intima con el que dice: Sed santos, porque
yo soy santo. ¡De esa gente hablamos, gente de quienes dan testimonio sus
vecinos, las autoridades de la ciudad, y primero que todo sus familiares
cercanos: padres, abuelos, hermanos, primos, sobrinos, nueras y nueros. Lamentablemente
los obreros de la undécima hora, serán juzgados por golpear con su efectividad
a algunas organizaciones poderosas que se resienten y muestran resistencia a
cambios (No de doctrina), sino cultuales, y de metodologías que incrementen el
crecimiento espiritual más que el denominacional, por un temor irracional a “algunas
formas de desorden espiritual en nombre de Dios”, ¡claro, respetamos la
saludable actitud de celo de los primeros pioneros de la palabra! Conozco el temor a algunos excesos del pasado
en nombre de Dios, que han impedido la aperture a algunas operaciones divinas,
porque falta el discernimiento necesario para saber detectar al mismo Dios de
los padres de ellos, que se movió casi igual en los primeros años del siglo XX,
digo casi igual, porque en esos tiempos hubieron manifestaciones del Espíritu
en lenguas, y algunos dones de sanidad y profecía, aunque faltó suficiente
discernimiento para poner cada cosa en su lugar, y en su lugar quedó el temor;
casi igual pero no parecido a los tiempos de las décadas de los sesenta cuando
de nuevo se volvió a mencionar la realidad de apóstoles en medio de la iglesia
en los continentes; en los finales y primeros años del siglo XX, surgieron de
nuevo los Pentecostales con otras dimensiones de poder y las denominaciones
tradicionales se volvieron a cerrar, hablo de: Bautistas en sus diferentes
ramas;Anglicanas;Iglesias Luteranas, Iglesias de Cristo;Iglesias Metodistas;cuando
surgió el avivamiento de la calle Azusa en los Ángeles, California en el 1906,
que dio paso al primer movimiento pentecostal que a los tres años generó los
conflictos doctrinales que dieron cabida a la gran division cuando surgió la
restructuración de las ideas de Sabelio en el pasado en el 1909, cuando asumieron el credo y concepto de “solo Jesús”, o, “los
del Nombre”, una vez más en la historia surgieron temores y profundas
divisionse, en California, un año después, las demás congregaciones que se
abrieron al mover Pentecostal, asumieron el nombre de Asambleas de Dios en el
1910; oficialmente en el 1914 se realizaron las primeras actividades como concilio,
reconocidas ahora como Fraternidad Mundial de las Asambleas de Dios; luego
siguieron surgiendo otros grupos denominados pentecostales, como las iglesias
de Dios; Iglesias de Dios Pentecostal; iglesias Cuadrangulares;Santidad
Pentecostal; Movimiento Misionero Mundial;y de nuevo a raíz de los movimientos
del Espíritu a finales de las décadas de los cincuenta que surgieron los
llamados Carismáticos católicos, etc, etc; sin excluir a los poderoso
movimientos de las décadas de los setenta, (hablamos de los neomovimientos que
asumieron el mismo término que los Solo Jesús, o los del nombre retomaron de la iglesia católica, en el 1909,
me refiero al término “apostólicos”), refrescado en las décadas de los 70 y 80;
porque aunque muchos de los nuevos ministerios que ni eran católicos, ni
evangélicos denominados, que posiblemente nacieron de esos movimientos
"apostólicos", no se han detenido como sí lo ha hecho dicho
movimiento “apostólico” desde finales del 2000;cuyos dirigentes (muchos de
ellos con llamado de apóstoles), han seguido conduciendo las congregaciones más
a nivel episcopal (del púlpito hacia las bancas de manera general), sin ningún,
o muy poco parecido con la iglesia que conocemos de Hechos de los Apóstoles, y
las epístolas llamadas por la teología tradicional “pastorales”cuando en
realidad son epístolas con correcciones propias del apostolado ejercido por los
apóstoles al corregir las iglesia; antes del surgimiento de la jerarquía de los
“Obispos” en siglos posteriores. ¡Siendo esta la única visión que se ha
alcanzado a comprender en el movimiento “apostólico”, pues aunque se enfatice
mucho el término: Cuerpo de Cristo! Sin embargo, por cerca de cuarenta años, la
realidad es otra, porque las ovejas que todavía siguen naciendo como ovejas de
los prados del Señor a través de esos movimientos estancados, ¡Y continuan muriendo
como ovejas vegetando toda su vida en medio de reuniones cultuales, y sentadas
en las bancas sin fluir de unos a otros, de espíritu a espíritu como enseñan
las epístolas del Nuevo Testamento, y sin ningún compromiso con la gran
comisión de Mateo 28:18-20! Ovejas que no han sido guiadas a encontrar su
ubicación ni como piedras en el edificio; mucho menos como órganos funcionales
dentro del Cuerpo, ¡Pero mucho menos como adoradores individuales que tiene
acceso directo al Padre por Jesucristo a pesar de los más de quinientos años de
“reformas”! Ciertamente somos sacerdotes para orar por los perdidos, ¡Pero
también somos piedras vivas al nacer por el evangelio; que no estamos siendo
ejercitados como adoradores de conducta de Reino porque ni siquiera tenemos
identidad de HIJOS E HIJAS DE DIOS. Precisamente para recuperar estos
principios Nuevo Testamentarios es que Dios está invitando a los Obreros de la Undécima
Hora, para agilizar en UNA hora la labor de devolver, espiritualmente hablando,
la funcionalidad de cada creyentes que debiera estar siendo pulido para que
adquiera el carácter de Cristo en su conducta diaria; pulido como piedra viva
para que encaje en el edificio que está siendo edificado en Cristo; pero
también para que adquiera y sea desarrollado como órgano que es conocido por su
propia actividad espiritual dentro del Cuerpo en cada iglesia local. Necesitamos
ver en los continentes ¡No en algunos grupos aislados! Operaciones como las que
nos describen 1 Corintios 14:26, Efesios 5:18-19, Colosenses 3:16; y una
iglesia adulta camino a su total perfeción (maduración) en asumir
responsabilidades propias de su condición.
Obreros de la undécima hora, son impartidores de unciones que activan.
Leyendo acerca de
mi lenguaje, podrá comprender la razón por la que en estos tiempos del fin los obreros de la
undécima hora en la actualidad son considerados como personas desocupadas por
causa del lenguaje que emplean, el cual incomoda los oídos de los que se
mantienen dentro de las interpretaciones tradicionales, pues es un lenguaje considerado
errático y “lejos del modelo tradicional evangélico”; por esta y otras razones y
para que no actuemos como José adelantando tratos fuera de tiempo, el Espíritu Santo ha
estado llamando a cesación de un sin número de actividades rutinarias que más
bien generan falsas expectativas ha los hombres y mujeres que están siendo
formados fuera del sistema tradicional de interpretación, esto nos incluye a
los que estamos dentro del sistema pero que no cabemos dentro de lo que
supuestamente “debe ser la iglesia hoy”;
en realidad hay un sin número de actividades que ensordecen el alma y diluyen la
atención del espíritu para escuchar la voz del Espíritu de Cristo para que
seamos actualizados en los tiempos de restitución de dones completos del
Espíritu (son mínimo 26); y los dones completos del ministerio (son cinco), no
tres ni cuatro como enseñan algunos teólogos sin ciencia;por esa razón hay
muchos desocupados, que son marginados
de los púlpitos por su lenguaje Paulino, que están siendo invitados por el
Señor a dedicar más tiempos a la oración, el estudio directo de la palabra (sin
consultar libros tradicionales de interpretaciones y dogmas teológicos de los
siglos XIII, XIX y XX); miles de miles están siendo entrenados en el secreto porque
están siendo llamados para que se mantengan reposados y esperando de Él la
dirección objetiva, específica y direccional de su voz. A fin de cuentas, Él es el dueño de
la viña, y ha estado tomando las riendas en la culminación de la edificación de
su iglesia.
Definitivamente
creo que estamos viviendo los tiempos de las añadiduras de los detalles finales
del edificio compuesto por piedras vivas. Entendiendo que: Ovejas dependientes de
direcciones netamente horizontales, ¡Jamás saltarán de niveles que las hagan
avanzar verticalmente en su relación con Dios como Padre. El arquitecto y
constructor del edificio conoce la labor de los que Él necesita incluir en el
desarrollo de esos pequeños pero determinantes detalles, que son los que proveen
el acabado perfecto, que atrae a la vista y enaltece la construción. ¿No es
cierto, que nuestros locales de reuniones tienen muy poca vida vertical, en la
que no hay manifestaciones cotidianas de miembro a miembros, sino reuniones la
mayoría de las veces de entretenimiento, al preparárseles más programas para el
alma, que para el espíritu; discúlpeme si mis palabras suenan como clavos en
los costados; sin embargo, debemos entender que los obreros de la undécima hora
no representan cualquier tipo de obreros; sino que el dueño de la viña los
considera personas hábiles para captar el deseo del dueño de la viña, son
personas por lo que se vé, que hacen no solo lo que se espera de ellos, sino
que están atentos y no solo para escuchar la voz del Maestro de obra, sino que
también para poner por obra la labor que se requiere de ellos. Le sugiero que se lea Joel 2 entero,
especialmente el versículo 11 donde dice que Jehová dará su orden delante de su
ejército… ¿Cuál es ese ejército? Hermenéuticamente sabemos que esta profecía al
ser escrita por un hebreo, menciona algunos aspectos en los que se hace
referencia a Israel, especialmente en acontecimientos que tienen que ver con los tiempos del fin, por ejemplo,
al hablar de un ejército del cual se dice que es: semejante al cual nunca hubo
jamás, ni después de él lo habrá en años de muchas generaciones; esto jamás se
ha visto cumplido en Israel, a menos que se cumpla con el ejército del Oriente
(China), que cruzará el Eufrates que se secará y podrán pasar apie; recuerde
que hasta el día de hoy la única nación en el mundo que tiene un ejército de
más de doscientos millones es la China. Cuando Juan escuchó el número de
soldados que componían ese ejército el específicó-Yo oí su número-,porque para el tiempo en el que él escribe, la
población conocida de ese entonces no pasaba de cincuenta millones de personas,
por lo que tiene sentido su explicación para dar a entender su palabra profética.
[Apocalipsis 9:16, Apocalipsis 16.12]; también podemos decir lo mismo acerca de
este ejército que no tiene que ver con aquellos tiempos; otra cosa que debemos
resaltar es, que después del accionar de ese ejército se anuncia un
derramamiento del Espíritu, versículos 28-29; cosa que nunca se había visto, ni
se vio en los siglos posteriores al siglo I en Israel hasta el día de hoy. Esto
nos permite ubicar el cumplimiento de ese derramamiento más allá de Pentecostes
del siglo I; porque la realidad es, que en el día de Pentecostés en el aposento
alto apenas fueron llenos ciento veinte personas. Por todo esto, puedo decir
que la doble relación de la profecía de Joel, descrita en el capítulo 2, nos
permite conocer que se está hablando a futuro, y fuera de los lineamientos del
Israel nacional y físico ¡aunque el profeta haga mención de Israel porque eso es lo que él entiende como profeta hebreo!Por tanto,
hablar de los Obreros de la Undécima Hora en la parábola de Mateo 20 sin
conectarlo con Joel 2, es inventar y deducir cosas que bíblicamente no tienen
sentido si no incluimos a la iglesia de los tiempos del fin, que en el libro de
Joel, no deja de ser una mención de aquel misterio oculto por siglos eternos
como lo testifica el apóstol Pablo a los Romanos: «Y al
que puede confirmaros según mi evangelio y la predicación de Jesucristo, según
la revelación del misterio que se ha mantenido oculto desde tiempos eternos,
pero que ha sido manifestado ahora, y que por las Escrituras de los profetas,
según el mandamientos del Dios eternos, se ha dado a conocer a todas las gentes
para que obedezcan a la fe, al único y sabio Dios, sea la Gloria mediante
Jesucristo para siempre. Amén».[Romanos 16:25-26; aunque ni Isaías, ni
Joel, pudieron comprender el misterio que se devela y explica en Romanos, se
amplía en Efesios 2:13-22; donde se certifica, que de dos pueblos (judíos y
gentiles), Dios hizo UNO, en Cristo, y ¡Este era el misterio oculto por siglos
y edades! sin embargo, ese pueblo especial, único, diverso en razas y culturas
porque en Cristo no hay ni judío ni griego, ni hombre ni mujer, ni esclavo ni
libre, fue diluido y llevado a las tinieblas por el primer ejército que cayó
sobre la iglesia desde mediados del siglo II, ejército de falsos maestros del error
que Dios mismo envió (por permisión), como lo dice Joel 2:25, por la fragilidad
humana que lo sustituyó por otros intereses personales, ejército de maestros
que comenzaron a entrar a la iglesia a finales del siglo II, y que hasta hoy
prevalecen a través de sus enseñanzas que en su tiempo serán erradicadas, el
ejército de obreros de la Undécima Hora, propiciará mayor restitución que las
que no se vieron en los tiempos de la reforma de 1517, devolviendo así todas
las cosas prometidas antes de que Jesucristo vuelva por segunda vez a la
tierra; como se le reveló al apóstol
Pedro y lo testifica en Hechos 3:21. Por causa de todo esto, en estos tiempos
del fin de todas las cosas, Dios, como en el pasado con Israel, se está apresurando
a poner su Palabra por obra, sobre todo con los que saben conocer y ser capaces
de comprender dónde calzamos en su propósito.Los Obreros de la Undécima Hora, no basan su experiencia en
doctrinas o conceptos de interpretación teológica sino en firme y práctica relación
vertical con el dueño de la viña a través de una comunión efectiva con el
Espíritu Santo. En ese
sentido, los obreros de la undécima
hora tienen bien claro el propósito de la eternidad que va más allá de operar
en la habilidad de los oficios de Efesios 4:11; pues, es muy fácil operar en
cualquiera de los cinco oficios de apóstoles; profetas; evangelistas; pastores
y maestros, y sin embargo, ignorar la esencia de la existencia de esos oficios
que radica en engendrar en la visión de la eternidad a los creyentes, que deben
ser capacitados (educados en su espíritu), y entrenados para ser activados por
impartición y entrenados hasta que descubran la actividad que los debiera de
caracterizar como órganos del cuerpo de Cristo para ir a realizar la obra del
ministerio que es la de predicar el evangelio del Reino que centra su mensaje
en la Persona del Rey, y a hacer discípulos que nacen de apóstoles que,Imparten
sobre ellos y los entrenan por medio de la unción caminando con ellos hasta que
aprenden a fluir; pero también a mantener una comunión efectiva con el Padre,
con Su Hijo Jesucristo. [1 Juan 1:3]; y especialmente con el Espíritu Santo que
es el que nos capacita para tener comunión los unos con los otros. [2 Corintios
13.14; Filipenses 1:1].
Sabemos que hay un sexto sentido de entendimiento que radica en
mostrar en nuestros cuerpos la vida de Jesús, para que se manifieste la vida de
poder divino a través de los dirigentes
apóstoles; profetas; evangelistas; pastores y maestros hasta involucrar
en su unción a los miembros de su cuerpo, llamados todos los dirigentes a dar
ejemplo: «… llevando en el cuerpo siempre por todas partes la
muerte de Jesús, para que también la vida de Jesús se manifieste en nuestros
cuerpos. Porque nosotros que vivimos, siempre estamos entregados a muerte por
causa de Jesús, para que también la vida de Jesús se manifieste en nuestra
carne mortal. De manera que la muerte actúa en nosotros, y en vosotros la vida». [2 Corintios 4:7-12]. Los dirigentes de hoy,
debemos mostrar la vida de Jesús en todas nuestras acciones, para que la vida
que se nos ha concedido como obreros en la viña, sea transferida a los santos.
Por causa de este
requerimiento, en la actualidad existen muchos ministerios que están siendo
vigorizados y orientados en el secreto de la intimidad con el Espíritu del Señor,
para que podamos extender la vida de Jesús que llevamos dentro sobre los
miembros que entran a las congregaciones; pues en estos tiempos finales, no es
cualquier hombre o mujer de Dios que se requerirá para ser enviado a la viña a
realizar una labor que será extremadamente rigurosa para poder terminar el trabajo
de casi diecinueve siglos de atraso en el modelo original en que fue levantada
y presentada al mundo la iglesia en el siglo I.
Se requerirá de
hombres y mujeres de sensibilidad espiritual, habilitados en el conocimiento
exacto de la voz del Padre, y que sepan distinguirla de la voz del Hijo, y
sobre todo de la voz del Espíritu Santo que es quien nos llama, envía y dirige
en la obra. [Hechos 8:29; Hechos 13:2-4; Hechos 16:6-10]; en estos
tiempos de tanta actividad (conferencias, seminarios,conciertos musicales,
dramas), ciertamente se requiere mucha quietud en el espíritu, y suficiente reposo
como para aprender a escuchar nuestro espíritu, ¡Le aseguro que se sorprenderá
de cuánta intromisión hemos permitido al alma en los asuntos de la obra! Como
nunca se requiere conocer qué está diciendo el Señor Jesús desde su trono, y
cuánta tradición teológica está adormeciendo a los millones de nuevos creyentes
que entraron en las décadas de los noventa en adelante, porque sin saberlo (muy
poco nos hemos interesado en averiguarlo), seguimos bebiendo de las aguas
turbias de las enseñanzas dogmáticas de la reforma, o lo que es lo mismo que las
tradiciones teológicas tomadas por Lutero de la iglesia católica. ¡Por esta
razón los obreros de la undécima hora no caben todavía en el Sistema de
creencias! puesto que más bien, al ser terminadores de detalles, proveerán la
manifestación práctica, explosiva y determinante que embellecerá y culminará
con la plenitud de Cristo como NUNCA en la historia de la iglesia. Estamos
escuchando de cientos de siervos muy dinámicos y activos que están hablando el
mismo lenguaje: -¡El Señor me pidió que pare toda actividad, que me dedique a
estudiar la palabra, que descanse y vuelva a leer la Biblia!-.En estos últimos
dos años hemos recibido visita de siervos de diferentes continentes, y siervas
de ministerios mundiales, que al escucharnos hablar de como hemos sido
invitados a encerrarnos con Él, lloran, y desahogándose nos dicen:
-¡Ahora entiendo, lo que me está pasando! Escuchamos
una sierva con un ministerio de adoración a nivel mundial expresarnos: -Me he
sentido tan turbada, porque aunque propongo irme a la congregación me siento
extraña pero cuando me quedo, en la casa, recibo quietud, refrigerio en mi
espíritu y estoy viendo cosas que antes no entendía, pero que ahora las estoy comprendiendo-. ¡Por supuesto que también hemos escuchado
predicas por los canales televisivos, de siervos que están atacando a muchos
cientos de siervos que dicen que Dios los está invitando a quedarse en sus
casas! y dicen: -eso es erroneo, eso es del diablo, ¿como Dios te va a decir
que no vayas a la congregación a cumplir tus deberes?-. Mi amado o amada que lees,
creeme que respetamos todas las ponencias habidas y por haber; oramos tanto por
los que están siendo convocados para ser madurados en el entendimiento de la
labor que se requiere en los fines de los tiempos; pero también oramos por los
que atacan lo que no entienden, porque reconocemos que necesitamos la frecura del
Espíritu Santo, para no seguir haciendo la obra en nuestra fuerza, y forzando
las Escrituras que se constituyen en la espada inspirada por el Espíritu Santo
para que diga lo que le conviene a los interesados en atacar lo que no
entienden. Por ejemplo, se supone que
todos leemos que Dios usó a personas como Débora que se sentaba bajo una
palmera, y acudían a ella los necesitados de consejo y orientación, [Jueces 4:4];
sin embargo, también leemos de mujeres como Hulda la profetisa que era visitada
en su casa por los sacerdotes, y escribas enviados por el rey Josías. [2 Reyes 22:14-20]; ¿Estaba concentrada por
el Señor? Otro ejemplo lo tenemos en la vida de Ezequiel quien fue enviado a
encerrarse en su casa hasta que Dios le ordenara salir de nuevo. Mínimo estuvo
cuatrocientos treinta días encerrado. [Ezequiel 3:24- Ezequiel 4:1-7].Por esta
experiencia, respetamos criterios, sin dejar de obedecer lo que sabemos que
sabemos que viene de Dios avalado por las Escrituras ayer, que son valederas
hoy, y lo serán siempre mientras Jesucristo sea el mismo de ayer, y hoy, y por
lo siglos. Seguir la dirección del
Espíritu a la luz de las Escrituras que Él inspiró es imperastivo porque Él es
el único que realmente está revelando, las cosas que están sucediendo en el
mundo exterior y las que están por suceder, y sabemos que Él NUNCA nos va a
guiar a salirnos de todo lo que está escrito bajo su inspiración reconocida
desde Génesis hasta Apocalipsis. [2 Timoteo 3:14-17; 2 Pedro 1:20-21].
Por lo que se me
mostró en visión en el 2006, entiendo que estamos viviendo la parte que
corresponde a la selección de obreros para que vayan a la viña a trabajar cuando
apenas falta una hora para el fin de labores. Estamos en el tiempo en el que
Dios está llamando a su viña a gente que está en las plazas (lugares ajenos a
las reuniones formales donde se reúnen solo los que sienten que no caben en el
ambiente agobiante de una cultualidad sin cambios), gente que siente que no caben en el sistema,
ni se adaptan a las normas meramente dogmáticas y tradicionales; gente que en
su interior sienten profundamente la necesidad de ver cambios en la liturgia
evangélica; me refiero a ese ejército de hombres y mujeres que están recibiendo
tratos que son considerados “extraños”, “anormales”, para quienes no lo reciben, pero que son tratos
dados a través de visiones, sueños, y experiencias vivas con el Señor
Jesucristo, con el Padre, o con el Espíritu Santo; y que al contarlos, son
desechados, criticados y señalados como gente “rara”,sabemos que hay personas
extremistas que reciben tratos tanto de la carne, como de los espíritus de
demonios, cuyas vidas desmeritan los principios y valores morales y
Escriturales, ¡Pero necesitamos dicernir
lo inevitable de los tratos del Espíritu! Para no sacrificar personas que no
encajan en la estructura dogmática pues se sienten rechazados; cuando la
realidad es que es gente que está siendo preparada en el secreto de la
intimidad, donde están escuchando a Dios aunque de momento no entiendan muchas
cosas; gente a la que le dicen que Dios “no habla hoy”, “ni trata como en los
tiempos antiguos”. Al escribir me dirijo
ha ese ejércitos de obreros que están librando batallas en lo oculto contra fuerzas
del Hades, soldados que están siendo habilitados para la última batalla contra
el reino de las tinieblas. [Joel 2:1-11]; me incluyo en ese número y digo que somos
personas que nos gozamos con la ira de Dios no importando dónde se manifieste y
sobre quienes caigan sus consecuencias. Isaías 13:3 es otra de esas profecías
de doble relación, pues aunque las evidencias indican que él profeta se refería
a los soldados Babilonios, sin embargo, su contenido se extiende más allá del
tiempo del profeta y habla de dos tipos de personas, gente común (los
babilonios), pero también habla de gente especial, escogida para fines
espirituales; cuando leo esos pasajes un profundo respeto me envuelve por el
Dios al que adoramos y alabamos por sus designios omniscientes no solo como Creador,
sino por la profundidad de su propósito de revelarse en Jesucristo como nuestro
Padre; por esa causa cuando Él decide derramar sus juicios sobre personas, naciones,
ciudades y continentes, permitiendo terremotos, huracanes, tornados,
inundaciones, crisis financieras y corrupción en los gobiernos; respetamos su
perfecta voluntad demostrada de esa manera, como evidencia de su ira desatada
sobre hombres y entidades que corrompen su Santidad y sus principios; sabemos
que esos juicios a veces son derramados con enfermedades que obligan a
algunos a refugiarse en el descanso para ser tornados a la reflexión cuando no
paramos a tiempo en medio de tanto activismo sin unción real. Definitivamente
de una manera u otra, Dios tiene que llamarnos la atención para que no seamos
juzgados y echados a un lado junto con los que se ciegan con las cosas propias
del ministerio, sobretodo si sacrificamos la unidad de espíritu en la
iglesia,[1 Corintios 11:28-32]; El profeta Isaías recibió una revelación a
través de la cual se angustió al ver el mal en el pueblo lo que le hacía
consciente de que por la deslealtad del pueblo hebreo a los mandamientos de
Dios, estos atraían los juicios divinos sobre sí mismos, por eso decide con
anhelo de su espíritu estar en la presencia de Dios buscando su Rostro y su
Voluntad y por eso escribe: -Con mi alma
te he deseado en la noche, y en tanto que me dure el espíritu dentro de mí,
madrugaré a buscarte; porque luego que hay juicios tuyos en la tierra, los
moradores del mundo aprenden justicia-. [Isaías 26:9].
Entendemos que
los Obreros de la Undécima Hora, aunque en apariencia están siendo sacados de
la circulación ministerial en cuanto a actividades, y que por sus "extravagancias"
no cabemos en las iglesias tradicionales (incluso en algunas que se supone que
son "apostólicas"); y que en sentido figurado nos encontramos
desocupados en la plaza (porque son, somos conocidos, pero están,estamos marcados,
observados, poco atractivos e ignorados), que en apariencia no tienen trabajo
porque aunque conocen su labor (espiritualmente no son aceptados por las
denominaciones y las entidades religiosas), porque hablan lo que muchos no
entienden y no son muy populares por su lenguaje de restauración, y esto habla
de que muchos de los apóstoles, profetas y maestros de revelación de cosas de
los últimos tiempos, no tienen puertas abiertas para ministrar en los
púlpitos tradicionales;por supuesto que en ese núcleo no se incluye a los que han caído en errores
doctrinales apostatas.
La parábola de
los Obreros de la Undécima Hora, como podemos ver, nos indica que en el plan de
Dios hay un ejército de hombres y mujeres que están siendo preparados en el
secreto (alejados de los púlpitos), donde estamos recibiendo revelaciones y
entendimiento fresco de las Escrituras en un nivel fuera de serie, que golpea
inclusive a los "apostólicos", en muchas de sus exageraciones que se
salen de la palabra; Los Obreros de la Undécima Hora, somos gente que estamos
siendo llamados a más intimidad, porque se nos está aumentando el poder de la
revelación que va a activar poderosamente a la iglesia no como Asamblea de
creyentes; sino como órganos vivos del Cuerpo de Cristo con una unción que
desatará lo Sobrenatural sobre los continentes, porque Dios tiene reservada una
poderosa manifestación de la palabra de Ciencia que revelará ha Cristo COMO
NUNCA EN LA HISTORIA, ¡y esto es lo que provocará que
la Iglesia se levantará, caminará y correrá en el Poder del Espíritu de Cristo!Pero, ¡ojo!
Este ejército de sin nombres ahora, no serán exhibidos como “estrellas fulgurantes”
sino que avanzará cada uno en su puesto en el Cuerpo operando según su relación
individual con el Espíritu Santo que como nunca magnificará a Cristo. Sin
estrecharnos porque no nos “entendamos”.
Estamos
en los últimos y definitivos tiempos en el programa profético de Dios, en el
que pronto los cimientos de las estructuras que se han sobreedificado sobre el
Fundamento puesto por Jesucristo, serán estremecidas y solo quedarán los
fundamentos inconmovibles.
«Mirad que no desechéis al que
habla. Porque si no escaparon aquellos que desecharon al que los amonestaba en
la tierra, mucho menos nosotros, si desecharemos al que amonesta desde los
cielos. La voz del cual conmovió
entonces la tierra, pero ahora ha prometido, diciendo: Aún una vez, y conmoveré
no solamente la tierra, sino también el cielo. Y esta frase: Aún una vez,
indica la remoción de las cosas movibles, como cosas hecha, para que queden las
inconmovibles». [Hebreos 12:22-27].
¿Te gustaría saber si estás en la listo de este
ejército del fin? Es muy fácil saberlo, tu acercamiento y relación íntima con
Dios como Padre te lo hará saber, por sus tratos a tu espíritu y su poderosa
iluminación en la palabra Escrita, ¿Por qué no comienzas de nuevo a
reescudriñar las Escrituras? Ellas son las que dan testimonio de Cristo y el
propósito eternos revelado por el Padre para que fuéramos escogidos en Él.
Dr.
Luis Mercedes
A
los Pies de Jesucristo
excelente ! soy un obrero de la ultima hora y coincido con lo q ustedha expuesto. muchas gracias !
ResponderEliminar